
Fundador de Enfocando Vidas
Los principios son fuente de éxito empresarial
Por Xóchitl Rodríguez
Hoy por hoy, las empresas más fuertes tienen una cultura basada en principios, mediante los cuales definen cómo se deben conducir las personas en el negocio, afirmó Sergio Olivas, fundador de Enfocando Vidas, conferencista y escritor.
“Las empresas tienen que definir sus propios principios de acuerdo a lo que el dueño cree, para que los empleados tengan actitudes de acuerdo a tales principios”, reiteró.

Es frecuente que una empresa defina sus valores y no sus principios. Al respecto, explicó que los valores son creencias que las personas tienen y que consideran importantes, pero, debido a que son culturales, los valores que para algunos son buenos, para otros no. Por ejemplo, la mujer es valorada –y en consecuencia tratada- de distinta manera en diferentes países.

Los principios son como las leyes, agregó; son independientes de las creencias de las personas, son siempre buenos y siempre correctos. La gente decide si los obedece o no, lo que tiene un efecto. Son como las leyes.
Siguiendo el ejemplo de las mujeres, dijo que “tendríamos que ir a nuestro Diseñador –el Creador- quien dice que la mujer fue concebida frágil y se le debe dar amor; fue creada para ser amada, no entendida, con lo que los hombres tienen mayor benevolencia frente a Dios. Cada quien puede creer lo que quiera, pero estos son los principios”.
Es decir, los valores son definidos por la cultura y la forma en que son educadas las personas. Pero, hay que cuestionar si esa cultura es correcta. “Una empresa que quiera crecer necesita establecer sus principios; porque podrá tener los mejores sistemas contables y las mejores estrategias, pero si las personas actúan en base a sus valores, es posible que hagan lo incorrecto”, reiteró.

Establecer los principios es un tema de espiritualidad, “no hay otra forma de hacerlo”, aseveró. La gente anda buscando certidumbre, alguien en quien confiar y puede hacerlo en los principios que, como las leyes, no fallan.
En el mismo sentido, si las personas entienden quién es su Diseñador, podrán descubrir cuál es su propósito de vida, que muchos definen como un sueño, una visión o una meta. La definición no es importante, dijo, pero existen tres fundamentos esenciales para poder comprender este propósito:
Primero, aceptar que es un fin inspirado o dirigido por el Diseñador y que permite a las personas estar enfocadas. “Es decir, no nos creamos nosotros mismos; tenemos un Creador que nos definió con un propósito.

Preguntémosle a Él cuál es. Todo diseño tiene un propósito y el único que lo conoce es el creador. Cuando tú conoces ese propósito, te enfocas al día de hoy. Cuando no sabes a dónde vas, andas perdido, desenfocado”, explicó.

Segundo, da sentido y energía a la vida. Conocer el propósito de vida da sentido y plenitud porque está uno enfocado y comprende que no es para un fin propio, sino para servir a otras personas. “Las personas más plenas y satisfechas trabajan por una causa, no por dinero”, comentó.
Tercero, da trascendencia. El propósito de vida tiene impacto en el camino.
Sergio Olivas dijo que no debiera existir diferencia entre el propósito empresarial y el personal. Deben estar alineados y responder a la pasión por ese quehacer.

De diferentes encuestas que el conferencista ha aplicado a lo largo del tiempo, las personas que han mencionado conocer su propósito de vida han coincidido en contar con lo siguiente:
Tienen fe en Dios; son perseverantes; tienen enfoque; son pacientes; sus metas son cortas; y, disfrutan cada día.
“Así de sencillas, pero son las formas de ser y hacer más importantes”, concluyó.
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