Entrevista a:
Mtro. Darío Sánchez Valle
Co-Fundador de Bussiness Room Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial
Al estar empezando nuestras organizaciones, regularmente es normal que seamos “empresarios todólogos”, pero conforme la compañía va creciendo el dirigente debe trabajar en las siguientes dos tareas para que la empresa no se estanque: 1) Velar por la creación de valor presente y futura de su organización y 2) Ser un constructor de organización permanentemente, explicó el Maestro Darío Sánchez Valle, Co-Fundador de Business Room, Centro de Innovación y Desarrollo Empresarial.
“Crear valor es mantener a la empresa en el rumbo que le permita ser relevante para sus clientes, y que al mismo tiempo le permita generar los resultados económicos deseados para sus accionistas. Hoy puedo estar creando valor pero puede ser que no esté visualizando las oportunidades o retos del entorno y mañana deje de crear ese valor”, explicó.
El otro elemento para poder crear valor es Construir Organización: Trabajar de manera integral en articular los temas de Atracción de talento, Definición de la estructura organizacional correcta, Creación de métodos estandarizados de trabajo, Aseguramiento de las herramientas necesarias para llevar a cabo el método de trabajo y el Aseguramiento de que la organización cuente con los recursos económicos necesarios para llevar a cabo la misión y los planes de trabajo, expuso.
“Construir organización es un tema que involucra definición de estructura, atracción de talento, capacidad económica, herramientas y método de trabajo. Y ¿cuál es la guía de todo?, lo que debe estar siempre en el centro: EL PROPÓSITO Y LA VISIÓN de la empresa. Entonces, el centro se convierte en el rumbo y los objetivos de fondo de la organización.
Cuando la dirigencia no toma este rol, el riesgo es que mañana la empresa venda productos o servicios que los clientes ya no quieren, o que venda productos con lo que ya no se pueda ganar dinero porque hay tantos haciéndolo que los precios se han reducido y por consecuencia los márgenes de utilidad. Además, el dirigente de empresa debe estar preparándose constantemente, no confiarse porque los mercados son cambiantes, concluyó el Mtro. Darío Sánchez Valle.
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